Hemos decidido crear una sección especial sobre ideas o modelos de negocios que están condenados al fracaso, además de comentar las causas de esta condición, para evitarlas en nuestros emprendimientos.
La primera idea que presentamos y que podemos llamar irremediablemente condenada al fracaso es la propuesta de una toalla sanitaria reusable, que presentamos en vídeo:
Si tuvo la paciencia para verlo completo podrá observar que la propuesta planteada implica tres aspectos que sus promotoras consideran como positivas:
1. Es ambientalmente amigable: una propuesta que se basa en ser "pro ambiental", sin embargo, el sentido común determina que se deben limpiar cada vez que se "ensucien", lo que puede representar un promedio de tres lavadas por período (que incluye jabón, lo que no es ambientalmente amigable), por lo cual, este argumento es totalmente rebatible.
2. Para personas alérgicas: Si esto es cierto, pudiera ser un nicho de mercado interesante.
3. Es tradicional: como aspecto positivo, tratar de explicar que esto fue usado en una época por nuestras abuelas en los páramos andinos, principalmente porque las toallas desechables no llegaban a estos pueblos.
La propuesta presentada está condenada al fracaso por cuatro características particulares:
1. El retroceso: Si para lograr un objetivo pro ambiental se debe retroceder en tecnología y comodidad, salvo que sean apóstoles o mártires de la propuesta verde, difícilmente sea acogido por el gran público. Un producto que aporte más incomodidad que el actual, difícilmente sea atractivo. Esta propuesta es como presentar una carreta tirada por caballos, como sustituto ambientalmente amigable a los automotores. No va a prosperar.
2. Peor que la enfermedad: La propuesta "pro ambiental" tampoco es creíble ya que al tener que lavar dicha prenda individualmente (por razones obvias) se gastará agua (normalmente caliente para la limpieza) y jabón, ambos factores que afectan el medio ambiente, además del tiempo necesario que se debe emplear para lavar la pieza (a diferencia de la desechable), por no pensar en la necesidad de una "muda" en la oficina o en la calle, lo que representa otro problema sobre como guarda la pieza "usada".
3. Lo ideológico: La propuesta viene condimentada con un factor ideológico, como lo es: "no entramos en el ciclo comercial del capitalismo salvaje", sin embargo, se debe comprar la tela, el hilo, pagar las horas de las tejedoras, la energía eléctrica empleada, se deben vender, en fín, entra en un ciclo comercial igual que su competencia (salvo que sean regaladas o creadas por la misma usuaria).
4. Lo antisanitario: Presentar que el residuo de las toallas pueda usarse como abono casero es en extremo grotesco ya que en una casa o apartamento pequeño que se utilice, el olor debe ser en extremo nauseabundo. En la misma línea de pensamiento, pronto presentarán un sistema de sustitución de pocetas por macetas. No es ecológico, ni sanitariamente correcto.
En fn, estas cuatro (4) razones nos llevan a la convicción de que la presentada es una propuesta condenada al fracaso más absoluto en una sociedad civilizada o mayoritariamente urbana como la venezolana.
Para quienes creen que es una propuesta aislada o política, le invito a conocer a dos empresas que actualmente lo comercializan: Ecolunas (México) y RosaMetik (México).
Fernando Fuentes Pinzón
@emprendovzla
2 comentarios:
Yo estoy interesada en estas toallitas porque utilizo una copa menstrual (no son desechables). La copa no siempre se me ajusta perfectamente y a veces tengo muy pequeñas pérdidas, por lo que necesito llevar algo más que la ropa interior.
Las toallitas reutilizables y la copa, no sólo son mejores para el medio ambiente por reducir los residuos, si no que además mi problema de candidiasis ha mejorado bastante desde que no utilizo compresas ni tampones (son desechables).
Las manchas pequeñas de sangre salen muy bien con agua fría sin jabón si se lavan en el mismo día, así que no hace falta utilizar jabón y frotar y frotar. Claro, que con agua fría no basta, pero sí se quita el olor y el grueso de la mancha; y por tanto, se puede esperar a la próxima lavadora.
Lo que yo haría es utilizar la toallita, quitar la pequeña mancha con agua y dejar secar hasta poner la lavadora con otra ropa, como si de otra prenda se tratara.
No trato de quitar la razón al artículo, que es muy interesante, porque una de las cosas que muestra es que puede ser peor utilizar jabón que utilizar compresas desechables para el medio ambiente. Simplemente, veo que para la copa menstrual es muy interesante utilizarlas.
Una cosa a favor de su artículo es que la toallita, si no se usa junto con una copa menstrual; como mínimo, va a tener que lavarla 3 veces al día o más, según la cantidad de flujo que tenga esa mujer.
3 veces al día multiplicado por 5 días de sangrado... 15 lavados.
Lavados: Primero con su agua fría y después con su agua caliente y jabón (es muy importante quitar la mancha con agua fría primero, si no, no hay quien la quite).
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